El dilema humano surge de una existencia cuyo sentido ha sido prefabricado por el temor y la ira. Estos sentimientos son el acompañante de la ignorancia.
Todos somos educados en el temor para ser parte de una civilización del odio, de la guerra como industria y del consumo.
Quien tiene la suerte de carecer de todo y aún ser feliz es libre, pero totalmente está condenado a un destino: El de ser catalogado como una persona sin suerte. Como un demente que es capaz de sentir alegría, satisfacción, que vive estética y positivamente sin tener, sin hacer, sólo siendo.
Cual es el secreto, la auto-educación para la libertad, no para el trabajo, el consumo, la acumulación.
Amigas y amigos, los invito a la huelga de consumidores, no ganar dinero, no gastar dinero, SOLO VIVIR.
El derecho fundamental a la felicidad, empieza por no hacer nada. Si un millón de personas se paran y no hace nada y sus familiares y amigos les siguen, derrocan un gobierno o un sistema sin recurrir a la violencia, sin matar, sin insultar, EL SISTEMA CAE PORQUE CAE.
Tomen jugo de mandarina, lean el Bhagavad Gita, escuchen a Mozart, hagan el amor y monten en bicicleta, no paguen impuestos, no lleven dinero al banco y no tomen prestamos. SONRÍAN, la vida sí puede ser diferente y mejor, sin ejércitos, policias, cámaras de vigilancia, estatutos penitenciarios, DSM-VI, antidepresivos, abogados y médicos husmeando en las cuentas, convenciendo por la amenaza de la muerte, y la carcel.
lunes, 4 de abril de 2011
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